Es indignante tener que negar una y otra vez que el Movimiento Feminista no está dividido, que no hay “distintas sensibilidades dentro del feminismo”, o que frente al “feminismo clásico” no hay un “feminismo moderne, inclusive y diverse”.
El Movimiento Feminista nunca ha estado dividido, aunque sí ha sido parasitado. Pero después de más tres siglos de lucha constante con el modelo cultural y socioeconómico patriarcal y con las ideologías políticas que, tanto a derecha como a izquierda, lo sostienen, el proceso de sanación en este momento se mantiene con muy buen pronóstico.
Por eso el sábado 2 de Marzo las mujeres Feministas acudirán en numerosas ciudades españolas a la Concentración organizada por la plataforma estatal Confluencia del Movimiento Feminista, porque tras un año de la aprobación de una ley fraudulenta, peligrosa y negacionista de los principios científicos más básicos, por supuesto me estoy refiriendo a la “ley trans”, en esa Concentración volveremos a exigir delante de la ciudadanía su revocación y explicaremos los graves motivos que nos mueven a hacerlo.
Porque existen numerosos y muy graves motivos detrás de nuestro rechazo a la “ley trans”, y es inaceptable la censura y la violencia con que intentan impedir que los demos a conocer, como recientemente hemos podido comprobar que le está ocurriendo a Silvia Carrasco, Doctora en Antropología, profesora titular del Departamento de Antropología Social de la Universidad Autónoma de Barcelona y responsable del Área de Infancia e Inmigración, cuyas investigaciones se han centrado en temas educativos en contextos de diversidad cultural y desigualdad social.
Silvia Carrasco es una afiliada del Partido Feministas al Congreso (PFAC), y desde PFAC hemos hecho público nuestro reproche al Decanato de su Facultad, al Departamento, al Rector de la UAB, Javier Lafuente y al @observatori_uab per a la Igualtat porque están eludiendo su deber de defensa a Silvia Carrasco y a otras compañeras docentes que se ven en su misma situación.
Dentro del ejercicio de sus funciones les corresponde pronunciarse contra el hostigamiento al que son sometidas y defender su derecho a la libertad de expresión y de cátedra, actualmente conculcados en esta Universidad, aunque no es la única en que estos lamentables hechos se están sucediendo.
Por eso exigimos que la Conferencia de Rectores de Universidades Españolas (CRUE) se posicione sobre el clima de hostilidad y acoso al que están siendo sometidas numerosas docentes, que se muestran críticas con la identidad de género o con la autodeterminación de sexo, conceptos cuestionables que no han sido demostrados ni por la ciencia ni aceptados por la comunidad científica internacional.
Las mujeres Feministas expresamos nuestro rechazo desde el rigor y el respeto al conocimiento científico presente en áreas como las Ciencias de la Salud, las Ciencias Sociales, las Ciencias de la Educación, y quienes nos intentan amordazar o intimidar lo hacen desde el fanatismo y la predicación, lo que lleva a extremos negacionistas imposibles de aceptar desde la racionalidad.
Pero la “ley trans” no es la única estafa Patriarcal que nos han colado nuestras/os representantes políticas/os. Otra estafa Patriarcal ha consistido en dejar intencionadamente fuera de la Ley Orgánica 10/2022, de 6 de septiembre, de garantía integral de la libertad sexual la actividad pornográfica y prostitucional, dando apoyo jurídico a las normativas autonómicas que en Gobiernos de distinto color político ya habían actuado así en Estrategias contra la Trata y contra la Violencia Sexual
Y nuevamente han legislado dando la espalda a las evidencias científicas aportadas desde las Ciencias de la Salud y las Ciencias Sociales, que no dejan lugar a dudas sobre el impacto lesivo que tiene para la salud de las personas prostituidas (en su inmensa mayoría menores y mujeres) y para la convivencia igualitaria efectiva entre los sexos, la permisividad social ante la depredación proxeneta y la dominación putera.
La evidencia del daño, y la obligación cívica de prevenirlo y la obligación política de llevarlo a cabo, forma parte del ideario reivindicativo Feminista desde hace mucho tiempo, y dentro del Feminismo de la II República del que tan orgullosas nos sentimos las Feministas españolas es de obligado cumplimiento la mención a Clara Campoamor, así como el recordatorio del Acto Homenaje que el Movimiento Feminista de Madrid le hará el domingo 3 de Marzo en la Plaza de Corps, en el que se reclamará la aprobación de una Ley Abolicionista de la prostitución y se realizará una interpretación teatralizada del discurso abolicionista de Clara Campoamor en el Congreso en 1932.
Durante la II República y gracias al sólido apoyo brindado por el Ministerio de Sanidad se consigue la aprobación en las Cortes de un Decreto Ley Abolicionista de la prostitución.
Sin embargo cuando tras 40 años de anulación franquista de los derechos de las mujeres, conseguimos un modelo democrático que se supone que garantiza realmente la preservación de nuestros derechos, incluidos los referidos a nuestra salud sexual y reproductiva, la cobardía o la incapacidad para desprenderse de los peligrosos sesgos androcéntricos impuestos patriarcalmente de quienes hasta el día de hoy por quienes han dirigido el Ministerio de Sanidad, ha propiciado que la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) no esté recogida como un derecho sanitario de las mujeres; que la actividad pornográfica y prostitucional no esté recogida dentro de la tipificación de las violencias sexuales, y no se atiendan sus secuelas con la atención sanitaria especializada que precisan; que la fisiología propia de las mujeres y su derivación en enfermedades específicas sea considerada como de segundo orden, y carezca de los recursos precisos para la investigación y la detección temprana por parte de las/os profesionales sanitarias/os.
Así que cuando el 8 de Marzo en Madrid haya dos Manifestaciones, en Barcelona haya una Concentración y una Manifestación, y en otras ciudades haya Bloques Abolicionistas claramente diferenciados dentro de la Manifestación con motivo del Día Internacional de la Mujer, no estaremos ante la división del Movimiento Feminista, sino ante la constatación de que las mujeres Feministas no somo marionetas en manos de quienes comulgan con el mantenimiento de un modelo segregacionista en función del sexo, que mantiene y reproduce la subordinación de las mujeres a través del maldito género.
La docilidad y el consentimiento nunca han formado parte del ADN de las luchadoras por la Igualdad de Derechos, Oportunidades y Responsabilidades entre los sexos, cuyo recuerdo tendremos presente el 8 de Marzo las mujeres Feministas que nos manifestemos o nos concentremos.
Este 8M las mujeres Feministas diremos que estamos hartas de la manipulación de nuestra Teoría política, y diremos que basta ya de tanta insolvencia (aunque en ocasiones es imbecilidad) política respecto a la toma de decisiones que incidan, realmente, en el cambio de modelo de sociedad que ha de conseguir que vivamos dignamente todas y todos.
