Comienzo con ilusión mi colaboración en El Común explicando el porqué del título de esta columna. Un 9 de octubre, hace 75 años, el primer batallón de la Brigada 21 de la Agrupación de Guerrilleros Españoles cruzaba los Pirineos. La “Operación Reconquista de España” había comenzado. En mayo de ese año 1944 se había consumado la gran victoria antifascista de los pueblos contra las potencias del eje. Pero el franquismo permanecía, nadando en una mar de contradicciones internacionales y de sangre del pueblo.
Este artículo no pretende analizar las causas de la derrota de la última gran ofensiva armada contra el franquismo. Ante el complejo panorama político que tenemos por delante, esta columna pretende reivindicar a los miles de guerrilleros que participaron en aquella operación y que, tras el repliegue, continuaron luchando.
Siempre guerrilleros, nunca bandoleros. Derrotados en el Valle de Arán, pero nunca vencidos. El 75 aniversario de la “Operación Reconquista de España” ha pasado sin pena ni gloria. La responsabilidad seguramente sea compartida y todo un síntoma de la situación que atraviesan las organizaciones que hoy se reivindican obreras y revolucionarias. Reflexionando sobre esta cuestión recordé un pasaje escrito por Daniel Arasa en su libro “Años 40: los maquis y el PCE”, en el que narra la sorpresa de los soldados franquistas que perseguirán a los guerrilleros, avanzando hacia la frontera francesa, al encontrar en los árboles unas tiras de papel en las que se podía leer una consigna: ¡Volveremos en primavera! Esa primavera aún no ha llegado. Y a quienes seguimos luchando nos toca seguir trabajando por ella. De ahí el título de esta columna: ¡Volver en primavera! Y, para ello, es necesario actuar con coraje.
Tal y como señala la cabecera de El Común, siguiendo la famosa frase de uno de los fundadores de L’Humanité: “el coraje es buscar la verdad y decirla”. Los artículos que seguirán al presente seguramente no sean pacíficos. La clase obrera necesita construir una independencia con la que hoy no cuenta. Su propia independencia, que se debe manifestar en lo ideológico, en lo político y en lo organizativo. Cuestiones como el carácter del posible Gobierno nacido del pacto entre el PSOE y Unidas Podemos; el carácter y los retos que plantea el desarrollo de la extrema derecha en España; la fase que atraviesa la formación capitalista española y las tareas del momento; la siempre polémica cuestión nacional o la estrategia revolucionaria que se corresponde con los tiempos presentes, son asuntos en los que debemos profundizar y sobre los que es urgente abrir un amplio debate que no renuncie a la polémica constructiva.
Carlos Marx, el 27 de octubre de 1854, en un artículo en el New York Daily Tribune, describía la marcha de los acontecimientos en España de la forma siguiente: “En la época de las Cortes, España se encontró dividida en dos partes. En la Isla del León, ideas sin acción; en el resto de España, acción sin ideas”. Espero que este nuevo proyecto comunicativo que representa El Común contribuya a encontrar la necesaria correspondencia entre ideas y acción, la correspondencia entre teoría y práctica, imprescindible para quieres nos hemos comprometido para que, más temprano que tarde, vuelva la primavera.
