Puri Liétor González, Secretaria General del Partido Feministas al Congreso (PFAC).
Estamos ante un nuevo 1º de Mayo, y ante una nueva Manifestación promovida y organizada por los sindicatos, cuya labor se centra en proteger los derechos y promover los intereses de los/as trabajadores/as en lo que respecta al salario, las prestaciones y las condiciones de trabajo.
El PFAC, como ya hicimos el año anterior, se sumará a las reivindicaciones laborales pero señalando las reivindicaciones políticas Feministas respecto a la organización y las condiciones del trabajo, que un año tras otro quedan fuera del foco mediático.
Porque en PFAC coincidimos plenamente con el análisis realizado por la Catedrática de Economía Aplicada y Vicepresidenta de Economistas frente a la crisis Cecilia Castaño: “El mercado laboral ha sido siempre masculino y todas las instituciones que lo regulan están diseñadas en función de lo que son las características y los hábitos de vida de los hombres.”
Y además sabemos que la causa se encuentra en la relación asimétrica que el maldito género ha impuesto sobre los sexos, cuyo resultado es la jerarquización que ha situado a las mujeres como el segundo sexo.
Un claro ejemplo es el hecho de que a principios del siglo XX el perfil de la trabajadora de fábrica o de establecimiento comercial era de una joven soltera y el de la trabajadora a domicilio era una mujer casada y con hijos, según queda recogido en los estudios sociológicos de esa época, y lo que encontramos en el siglo XXI es que el perfil de la trabajadora a jornada completa es el de una mujer sin responsabilidades familiares, mientras que el perfil de la trabajadora a tiempo parcial es una mujer con responsabilidades familiares.
En 1910 Emma Goldman, de ideología anarquista, considerada “la mujer más peligrosa de América” porque era una oradora magnífica y desarrollaba con enorme brillantez sus argumentos en defensa de la paz, los derechos de los obreros o el control del cuerpo femenino, encarcelada en 1916 por defender la utilización de los métodos anticonceptivos y la posibilidad de controlar la maternidad, deportada de EEUU en 2019 por su oposición al impulso bélico que generó el desastre humano y material de la I Guerra Mundial, publicó un ensayo titulado “Prostitución”, donde explicaba lo siguiente:
__”¿Cuál es la verdadera causa que origina la prostitución?. Naturalmente es la explotación del capitalismo con una labor pagada a un misérrimo precio, lo que empuja a miles de jóvenes mujeres, muchachas y niñas de poca edad hacia el pozo sin fondo del comercio del lenocinio. (…) Reginald Wright Kauffmong, periodista, en The House of Bondage, uno de los primeros y serios esfuerzos para estudiar este mal social, demuestra que nuestro sistema industrial no ofrece a muchas mujeres otras alternativas que las de la prostitución, aunque si el autor hubiese pintado la vida de una mujer de otra esfera, se habría hallado con idéntico asunto y estado de cosas. La inferioridad social y económica de la mujer, es directamente responsable de su prostitución. No es más que una cuestión de gradaciones que se venda a un hombre, casándose, o a varios.”
En 2023 ¿qué datos oficiales podemos encontrar sobre prostitución y trata, ya que ambas son elementos vinculantes y la trata existe y está fomentada por los puteros para mantener su sexualidad tóxica? Aquí apoyamos algunos:
__ según datos de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) de los casos documentados de personas en situación de Trata casi tres cuartas partes de ellas eran mujeres y niñas. La Trata con fines de explotación sexual es el principal tipo de explotación en mujeres y niñas, mientras que los trabajos forzados es el principal en hombres y niños.
__la explotación sexual es el principal objetivo en todas las regiones del mundo salvo en África, donde son los trabajos forzados.
__centrándonos en Europa, la Estrategia Europea contra la Trata de Seres Humanos, impulsada por la Comisión Europea, constata que el 60% del tráfico de personas se realiza con fines de explotación sexual, y el 92% de las víctimas son mujeres y niñas.
__según el informe “Trata de personas hacia Europa con fines de explotación sexual”, de la ONU contra la Droga y el Delito, el porcentaje de hombres que pagan por sexo a lo largo de su vida en España es del 39% frente al 19% de media europea.
La actividad pornográfica y prostitucional no son nichos laborales para menores y niñas, porque conculcan el derecho a la preservación de la salud, de la integridad física y de la libre disposición del cuerpo, y las consecuencias para la salud integral y el número de asesinatos en menores y mujeres prostituidas está tan extensamente documentado, que es vergonzoso e inaceptable la más mínima alusión a su enfoque como “trabajo sexual”.
Otra actividad que conculca los derechos antes mencionados y de la misma manera es la explotación reproductiva, como no, de las mujeres.
¿Y por qué ante semejante expolio de derechos no hay una reacción social mayoritaria de rechazo a estas prácticas? La respuesta está en el modelo de socialización androcéntrica que ha blindado la asimetría entre los sexos, gracias a la ayuda inestimable aportada por el maldito género. Este fragmento de un artículo publicado en una revista de Medicina Psicosomática y Psiquiatría de Enlace es muy clarificador:
__”El discurso androcéntrico de la medicina fundamenta la existencia del fenómeno del sesgo de género (es decir, de la asimetría entre los sexos) en la praxis clínica, definido como la prestación de asistencia médica de forma inapropiadamente distinta o similar –en base a la evidencia científica disponible– a mujeres y hombres. La praxis médica sesgada por género perpetúa la invisibilización de las eventuales idiosincrasias bajo el manto de la normatividad o la universalidad, la concepción de la salud de mujeres y hombres –y especialmente de la salud femenina– en base a los significados heteropatriarcales de los mismos, y el uso del estamento médico para el mantenimiento de estructuras de control que impiden la legítima soberanía sobre el propio cuerpo.”
En 2023 es inaceptable que se mantenga está invisibilización en el estudio de la salud integral de las mujeres, y el abultadísimo número de las/os profesionales que se acogen al derecho a la objeción de conciencia ante una IVE de una gestación no deseada es otro ejemplo más.
Y los datos indican que la brecha entre lo sexos lejos de disminuir está aumentando: “La pobreza tiene rostro de mujer. Según cifras de la Organización de Naciones Unidas, el 70% de las personas pobres en el mundo son mujeres. Es alarmante ver que una de cada cinco niñas en el mundo sufre de pobreza extrema. Es decir, están por debajo del umbral de pobreza.”
La Teoría Ética y Política Feminista tiene propuestas para revertir esta situación, que pasan necesariamente por deslegitimar la herramienta que ha blindado la asimetría entre los sexos y la situación de opresión en que menores y mujeres se encuentran, sin importar el tipo de gobierno que haya en el país en el que viven. Tanto las mujeres afganas como las canadienses comparten la imposición genérica que las sitúa como “segundo sexo” en el imaginario social compartido por la especie humana.
Es imprescindible que cambie ese imaginario social para poder conseguir la Igualdad Efectiva entre mujeres y hombres, que es la reivindicación central del Movimiento Feminista y la mejor garantía para el fortalecimiento de nuestro modelo democrático.
Pero todo el trabajo emprendido por profesionales Feministas para impulsar ese cambio se ha visto bloqueado, censurado y perseguido por una teoría inmovilista que busca mantener el modelo existente. La teoría queer, y la Ley 4/2023, de 28 de febrero, para la igualdad real y efectiva de las personas “trans” y para la garantía de los derechos de las personas LGTBI, junto con todas las leyes autonómicas aprobadas en aplicación de la Ley 3/2007, de 15 de marzo, reguladora de la rectificación registral de la mención relativa al sexo de las personas que proporcionó aval jurídico a la “identidad de género”, están impidiendo el libre ejercicio de la práctica profesional de mujeres Feministas, pero ningún sindicato está denunciando este hecho.
Ante esta realidad desatendida por nuestra clase política y nuestra representación sindical, PFAC vuelve a sumarse a esta Manifestación con proclamas reivindicativas Feministas, y con el compromiso de representarlas políticamente.
#JuntasHaremosHistoria
