Resistir ya no es una opción

0

El Ejecutivo de Pedro Sánchez considera que, de momento, el ataque dirigido por parte de una fuerza política de ultraderecha hacia los derechos de las mujeres ha sido neutralizado, aunque advierte que seguirá vigilante: «No toleraremos otro intento que suponga un retroceso y que limite los derechos y libertades de las mujeres y que incumpla la ley orgánica de Salud sexual y reproductiva y de la interrupción voluntaria del embarazo».

Así que debemos entender que todas las personas integrantes de ese Ejecutivo conocen los derechos de las mujeres y que asumen su preservación y defensa. Pero por desgracia no es así, y una vez más se ha perdido una magnífica ocasión para hacer pedagogía sanitaria dirigida al grueso de la opinión pública, y centrada en los efectos adversos que para el desarrollo de una existencia saludable y plena tiene la imposición de la normatividad social asentada en el maldito género.

Porque en ningún momento de todo este despliegue mediático y político se ha incidido en el núcleo del que surgen los derechos de las mujeres, NUESTRO SEXO, porque uno de los procesos psicofisiológicos que nos identifica como hembras de la especie humana, es decir, como mujeres, es la capacidad de gestación, que nunca debió ser convertida en la obligación de gestación, parto y maternidad para ninguna niña, adolescente o mujer.

El hecho de la maternidad impacta de forma drástica en el desarrollo de la vida seguida hasta el momento por toda mujer, esa vida ya no será la misma, y las repercusiones que esto conlleva en nuestra salud integral son múltiples y de muy variada tesitura. 

Teniendo en cuenta todo esto, ante una gestación no deseada, la interrupción voluntaria del embarazo tiene que mencionarse como lo que es, un derecho sanitario de las mujeres encaminado a la preservación de su salud integral, que tiene que ser entendido y asumido por todo el mundo porque los derechos humanos de las mujeres basados en el sexo no se debaten pero sí necesitan ser reforzados pedagógicamente, ya que todas/os continuamos inmersas/os en un modelo de socialización androcéntrico cuyo cometido es el mantenimiento de la subordinación de las mujeres en todos los niveles:

__” Es imprescindible una reflexión colectiva que permita detectar los modos de reproducción del orden patriarcal puesto que se sigue reproduciendo en la actualidad. Este orden patriarcal actúa de tal forma que modela nuestra subjetividad desde el inicio de nuestras vidas, dado que es el orden lógico que rige nuestro sistema social. A medida que vamos haciendo visibles (y desmontando) capas de orden lógico patriarcal, a medida que vamos ganando conciencia de la desigualdad y lucidez para enfrentarla, las capas que subyacen son cada vez más difíciles de detectar y por tanto de remover, pero siguen garantizando la reproducción de ese orden lógico de una forma cada vez más compleja, sutil y perfecta.” Fragmento de la introducción redactada por Almudena Hernando, antropóloga, del libro “Mujeres, hombres, poder. Subjetividades en conflicto”

El objetivo de la ideología Feminista es revocar un Orden Patriarcal al que hemos tenido que arrancarle nuestros derechos, hecho que no le ha gustado y que trata de revertir con todos los enormes recursos que tiene a su disposición. Por eso es tan importante difundir y fortalecer los principios políticos asentados en el principio de igualdad efectiva de mujeres y hombres, porque son los únicos que combaten las estructuras de pensamiento sexistas. 

Pero desde el Ministerio de Sanidad de este Gobierno, de coalición sí, pero Feminista no, no hubo intervenciones en los medios de comunicación para hacer la pedagogía que desde la aprobación de la Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, para la igualdad efectiva de mujeres y hombres este Ministerio tiene encomendado hacer, y que tendría que haberse visto reforzada desde el Ministerio de ¿¿¿¿Igualdad????:

__ “Artículo 27. Integración del principio de igualdad en la política de salud.

1. Las políticas, estrategias y programas de salud integrarán, en su formulación, desarrollo y evaluación, las distintas necesidades de mujeres y hombres y las medidas necesarias para abordarlas adecuadamente.”

La Constitución de la OMS afirma que “el goce del grado máximo de salud que se pueda lograr es uno de los derechos fundamentales de todo ser humano.” Y establece que el derecho a la salud abarca libertades y derechos. Entre las libertades se incluye el derecho de las personas de controlar su salud y su cuerpo (por ejemplo, derechos sexuales y reproductivos) sin injerencias (por ejemplo, torturas y tratamientos y experimentos médicos no consensuados).

Los derechos incluyen el derecho de acceso a un sistema de protección de la salud que ofrezca a todas las personas las mismas oportunidades de disfrutar del grado máximo de salud que se pueda alcanzar.

Pero la aplicación del derecho a la preservación de la salud en el caso de las mujeres inconcebiblemente aún no está asegurada, y cuando parecía que algunas atrocidades patriarcales («Aunque las mujeres se agoten y se mueran de tanto parir, no importa, que se mueran de parir, para eso existen”. Martín Lutero, s XV-XVI) estaban desterradas de la práctica social, situaciones como las que están viviendo las mujeres afganas sin que se mueva un dedo internacionalmente para evitarlo, espolean con más ímpetu las reivindicaciones Feministas para revocar la brecha entre los sexos establecida por el Orden Patriarcal, y mantenida con mano férrea a través del género:

__” Prohibiciones del régimen talibán a las mujeres, además de ir a la escuela y universidad: Las mujeres afganas no pueden ser atendidas por sanitarios varones. Al haber un número tan reducido de médicas y enfermeras, son muchas las que no pueden acceder a una atención adecuada, lo que deriva en problemas de salud de diferente gravedad e incluso la muerte.”

Pero no solo en un aberrante régimen Talibán se conculca el derecho a la preservación de la salud y de la integridad física a niñas y mujeres, en países orgullosos de su sistema de gobierno democrático, como es el caso de España, continuar dando la espalda a los Informes sanitarios que muestran claramente que la prostitución es una actividad enormemente lesiva para las personas prostituidas, que mayoritariamente son niñas y mujeres, y negarse a debatir una Ley Abolicionista del Sistema Prostitucional elaborada teniendo como prioridad la prevención del daño y la sanación y restitución cuando éste se ha producido, es por completo inaceptable desde las posiciones ideológicas Feministas. 

El Ministerio de Sanidad tendría que haber presionado para que se produjera el debate de esa ley, tendría que haber aportado argumentos sanitarios a la opinión pública para que presionaran a los partidos políticos a entablar un debate riguroso, donde con argumentos sólidos se defendieran de verdad los derechos de las mujeres. 

Los argumentos Abolicionistas son sólidos, y una muestra de ello fue la Jornada Abolicionista organizada por el Partido Feministas al Congreso (PFAC) en Septiembre, “El Sistema Prostitucional: efectos en la salud y las condiciones de vida de las mujeres”, con testimonios de profesionales sanitarias, una trabajadora social, y tres mujeres cuyas biografías están atravesadas por un daño inmenso sufrido durante su mercantilización dentro del sistema prostitucional. Desde PFAC lo hemos hecho, ¿qué es lo que impide al Ministerio de Sanidad articular un discurso político Abolicionista como el nuestro? Ya conocemos la insolvencia del Ministerio de ¿¿¿¿Igualdad???? para articular un discurso político Feminista centrado en la defensa y fortalecimiento de los derechos de niñas y mujeres, pero también vemos que esa insolvencia se extiende a más Ministerios.

Y otro ejemplo de esa insolvencia política Feminista compartida por distintos Ministerios es lo ocurrido con la Ley Orgánica 10/2022, de 6 de septiembre, de garantía integral de la libertad sexual, en cuya redacción, por un lado, el Ministerio de Justicia tenía que haber hecho valer el conocimiento aportado por mujeres juristas Feministas, con lo que se habría impedido esta avalancha interminable de revisiones de condena e incluso de excarcelaciones para condenados por delitos de violencia sexual:

__” El número de condenados por delitos sexuales que se ha visto beneficiado por el nuevo marco de penas que recoge la ley del solo sí es sí asciende al menos a 244, entre revisiones de condena a la baja y sentencias posteriores en aplicación de la norma. Desde el 7 de octubre, cuando entró en vigor la reforma del Código Penal, se ha ordenado la excarcelación de 19 personas.” Noticia publicada el 20/1/23

Por otro lado, el ministerio de Sanidad nunca debió haber permitido que se excluyera de la tipificación de violencia sexual la prostitución y la pornografía, y que quedaran desprotegidas las menores dentro de la franja de edad de 16 a 18 años:

__” El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha anulado una condena de tres años y medio de prisión a un varón que había sido condenado en Melilla por un delito de abusos sexuales tras la entrada en vigor de la ley del sólo sí es sí al aceptar de oficio que ha quedado destipificado el antiguo delito de abuso sexual con menores con más de dieciséis años regulado en el artículo 182.2 del Código Penal.” Noticia publicada el 17/1/23.

Y respecto a la redacción de la Ley para la igualdad de las personas trans y la garantía de los derechos LGTBI, resulta inadmisible que, desde el Ministerio de Educación, Justicia y sobre todo Sanidad, no se aportaran los evidencias científicas, jurídicas y sanitarias que tenían que haber desmontado la dañina quimera queer:

__”Feministes de Catalunya ha elaborado un informe a partir de datos del Servei Trànsit del Institut Català de la Salut especializado en la atención a las personas con disforia de género por edad y sexo entre los años 2012 y 2020. Los resultados del análisis muestran un aumento exponencial en el número de personas atendidas y unos cambios demográficos preocupantes: de hombres adultos a niñas adolescentes. Hace nueve años, la mayoría de los pacientes eran hombres de más de 30 años y en la actualidad son las jóvenes de entre 15 y 24 años las que más acuden a estos profesionales. Se están disparando los casos de chicas preadolescentes y adolescentes sin que se entiendan las causas.” Noticia publicada el 1/12/22.

Así que con un listado de evidencias en la mano desde PFAC negaremos las afirmaciones de los partidos progresistas, sobre todo de quienes mayor carga de responsabilidad tienen, en esta incipiente precampaña electoral y en la campaña venidera, acerca de la defensa de los derechos de menores y mujeres: No, señor Presidente, no es cierto que el gobierno que usted preside esté defendiendo con eficacia los derechos de menores y mujeres.

A los partidos conservadores la defensa y fortalecimiento de nuestros derechos no les ha interesado nunca, y los ultraconservadores siempre intentan revocarlos, pero con eso ya contábamos. Con lo que no contábamos era con la deserción de los partidos progresistas en la oposición a la invasión de la doctrina neoliberal, que de forma manifiesta estaba apuntalando el odiado Orden Patriarcal. Y eso las mujeres Feministas no lo hemos llevado nada bien.

El Partido Feministas al Congreso (PFAC) surge de la constatación de esa deserción por parte de los partidos de ideología progresista, deserción que estamos viendo que no tienen intención de abandonar a pesar de la amenaza involucionista para los derechos de las menores y mujeres que es más evidente cada día que pasa.

En PFAC sabemos que necesitamos un partido de ideología Feminista en nuestro parlamento porque nos jugamos mucho. 

En 2020 la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, afirmó en un evento en Ginebra, para conmemorar los 25 años de la Conferencia de la Mujer en Beijing: “Estamos viendo los derechos de las mujeres siendo atacados desde muchos frentes. Debemos resistir todos los desafíos a la afirmación ganada con tanto esfuerzo de lo que sabemos: los derechos de las mujeres son derechos humanos y no son negociables. La dignidad humana no puede ser diseccionada, compartimentada, comprometida, ni puede ser un privilegio de pocos”. 

Tres años después la situación de ataque a nuestros derechos se ha incrementado y la resistencia tiene que dar paso a la ofensiva, a una Ofensiva Feminista articulada políticamente, y ese es el espíritu que impulsa a PFAC y que mostramos en nuestro lema: Juntas Haremos Historia.   

Artículo anteriorLa CGT manipulará en Francia los contadores para rebajar la factura a los panaderos artesanos
Artículo siguientePolonia entregará los Leopard a Ucrania, aunque Berlín no lo autorice
Puri Liétor
Purificación Liétor González. Licenciada en Psicología, siendo su área de formación y actividad profesional la Psicología Sanitaria. Nació en 1968 y eso le permitió conocer de primera mano la militancia política en clandestinidad en la figura de su padre y en su carnet del PCE. Es la nieta mayor de dos abuelas analfabetas cuyos maridos sí sabían leer y escribir, es más, su abuelo paterno llego a ser Secretario General del PSOE durante la República en su pueblecito de Jaén. Pasó de feminista anónima a activista feminista cuando conoció la primera sentencia de La Manada de Pamplona de la Audiencia de Navarra, y pasó de votante a militante de Podemos cuando en su Municipio se quedaron a un puñado de votos para tener un concejal mientras que VOX conseguía dos. Actualmente es la Secretaria General del Partido Feministas al Congreso (PFAC).

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.