El mundo de la cultura contempla horrorizado la cancelación de la cultura rusa.
El Teatro Real ha anunciado este viernes que ha decidido suspender las seis representaciones de la obra La bayadera que el Ballet Bolshói iba a ofrecer en su escenario en mayo debido “al conflicto bélico desatado por Rusia en Ucrania, que está originando una grave crisis en el mundo y una dolorosa emergencia humanitaria”, según explica el coliseo madrileño en un comunicado. Algunos espectáculos son cancelados y en otros casos se han rescindido contratos, como son los casos de Valery Gergiev y Anna Netrebko.
El ministro de Cultura ucraniano, Oleksandr Tkachenko, reclamaba la limitación de la presencia rusa en el panorama cultural internacional y se le hace caso. El fascismo en su máximo apogeo. No recordamos algo así cuando USA bombardeaba Irak o la OTAN hacía lo propio en Sarajevo.
Valery Gergiev es uno de los directores de orquesta rusos más célebres e importantes del mundo, así como uno de los más damnificados por la situación. El Carnegie Hall de la ciudad de Nueva York decidió prescindir de sus actuaciones del pasado fin de semana, cuando Gergiev iba a dirigir tres conciertos con la Filarmónica de Viena. El pianista ruso Denis Matsuev, con quien iba a actuar, tampoco fue recibido por sus ideas políticas. La soprano Anna Netrebko, quien lamentó la guerra a en sus redes sociales, a la vez que afirmaba que no se puede obligar a las figuras públicas “a expresar públicamente sus opiniones políticas y condenar a su patria” también ha sido cancelada por la Ópera Estatal de Baviera.
El Reino Unido, por su parte, ha frenado en seco la gira del Ballet Estatal de Siberia y ha anulado la temporada de danza del Bolshói el próximo verano en la Royal Opera House de Londres. El Teatro Real de Madrid también cuenta con varias actuaciones programadas con el Ballet Bolshói, que de momento se mantienen. Por otro lado, la compañía ha anulado el concierto de Plácido Domingo en el Teatro Bolshói, en Moscú, el 8 de marzo.
En lo concerniente a la música pop, grupos internacionales que han decidido anular sus conciertos y giras en la geografía rusa son: Imagine Dragons, Green Day, Louis Tomlinson o Bring Me The Horizon entre otros. En el mundo del cine, Disney, Warner y Sony han tomado la decisión de no estrenar en Rusia sus últimas películas. Además, el festival de Eurovisión ha decidido prescindir de la representación de Rusia durante este año, condenando así la invasión rusa a Ucrania, algo que jamás ha hecho con Israel, país implicado, desde hace años, en una guerra activa contra el pueblo de Palestina.
¿Qué podemos hacer nosotros ante esta locura fascista? Leer a Tolstói, Gorki, Dostoyevski, escuchar a Chaikovski, Stravinski, Rajmáninov, Prokófiev o Shostakóvich, recordar a las bailarinas, Pávlova, Maia Plisiétskaia, Nuréyev, Baríshnikov y recordar a todos los artistas cancelados, pero sobre todo hacer hincapié en que la cultura nunca será el problema sino la solución.
