Llevo unos meses bastante desconectado de todo este rollo porque cada día me da más pereza el politiqueo barato. También puede ser que tengo una vida cojonuda y tranquila desde hace relativamente poco y, sinceramente, los líos de los señores diputados rollo «Melrouse Place» me la traen bastante floja. Supongo que será una mezcla de las dos cosas, ni idea, pero yo lo llamo desafección política. No creo que sea al único al que le pasa, también os lo digo.
Tenía pensado varios artículos, ¿Podemos llamar a las mierdas que yo escribo artículos? ¡Sí se puede! que para algo vivimos en la época del autobombo. Un artículo con cosas del estilo: la crítica constante a las tropelías podémicas está guay, pero intentemos usar argumentos que no sean de extremaderecha; las redes sociales nos hacen creernos más importantes de lo que somos, pero la verdad está ahí fuera, no pueden ser un sucedáneo de la organización; atacar a un colectivo vulnerable porque cuatro tarades se digan parte del mismo, ¿Nos convierte en abusones, sólo consigue dar voz al tarade de turno o las dos cosas?; la defensa a ultranza de personas que dicen autenticas barbaridades por afinidad personal, ¿Es individualismo y se usa como ataque al individualismo extremo? Bajarse del burro y reconocer lo errores propios, ¿es mejor tras la autocrítica o tras el insulto de los que están en nuestra trinchera?…
Temas todos interesantísimos de la leche, aderezados con insultos al gilipollas de Garzón, al trepa de Pablo Iglesias y al García Castaño. Pero, ¿Para qué? ¿A dónde lleva todo esto? ¿Alguien se ha parado a pensar que todos los errores que vemos en ese ente que ahora es identificado como izquierda, y no deja de ser una derecha con pintas, son los mismos errores que había en IU pero llevados al extremo? Quiero decir, ¿De dónde han salido los gerifaltes del engendro? ¿De qué vivían?
Y podemos buscar mil excusas para no responsabilizarnos de haber llegado a esta situación, que si los medios los auparon, que si es más fácil mintiendo que si blablabla que esta gente mamó de donde mamó y si la situación ideológica de IU hubiera sido la mitad de la que se vende, no habrían llegado dentro de la organización más allá de la puerta de la sede. Así que allá cada uno con sus pajas mentales que sin un mínimo de autocrítica no se avanza y no seré yo el que os la haga, que de Podemos no soy precisamente y eso ya lo hacían ellos hace unos años, además es que ya me cansa tanta radicalidad impostada.
Mientras todos los partidos políticos que forman el parlamento se lavan las manos y no asumen la pésima gestión de la pandemia o el desastre de Filomena y buscan un chivo expiatorio en el contrario, ya sea Ayuso, ya sea Pablooor (la futbolización de la política), mientras la subida de la luz dependiendo de quién esté al mano, es culpa de Rajoy o de unos señores muy malos contra los que no se puede hacer nada, mientras el capitalismo ya ha hecho de todos la máxima del sálvese quién pueda, mientras todo eso pasa, nosotros (que somos muy listos) hacemos un TT en Twitter, ponemos un par de tweets graciosetes sobre el cargo de Podemos que diga la estupidez del día, vemos a ver quién tiene la razón más larga y todas esas mierdas virtuales. Todo muy constructivo.
Yo lo voy a seguir haciendo, voy a seguir cagándome en la puta vieja de todos y cada unos de los dirigente de Podemos, de IU y de todas sus ETT’s satélite. Lo voy a seguir haciendo aún sabiendo que el subidón de ego que me da señalar a Monedero, Enriquito, Irene o algún otro tontolapolla similar la tontada que acaba de soltar, no esconde ni un ápice la marginalidad a la que han llevado mis ideas.
Mentiría si digo que no me preocupa ver a gente politizada (como yo mismo) hasta la punta del nabo de la política. Me preocupa y mucho. ¿Cómo le explicas a tu vecino que solo se ocupa de la política para ir a votar una vez cada cuatro años que el abandono absoluto en el que estamos es culpa de Ayuso porque no hace nada o del «Bloque progresista» porque tampoco? Conmigo que no se cuente para asegurar el sueldo vitalicio de cualquier hijoputa que esté viviendo de la izquierda. La derecha irá a votar, la izquierda que vote votará derecha con rastas y el capital no se había visto en otra así. Cuando me da la rabia, pienso en el crítico con la antigua IU, en su parte de razón, en que entiendo que comprase ilusión, en que algunos de ellos ahora mirarán para otro lado y se autocomplacerán en el «es que con estos pocos votos…» y en que otros, estarán igual que yo, igual que muchos votantes y militantes de la Izquierda de siempre, con una sensación real de que ahora si que no nos representa ni dios. Es desesperante.
Llamadme tonto, pero sigo teniendo esperanza en los pocos que seguís militando en IU que merecéis la pena, lo que no sé es si servirá de algo. El problema nunca fue Podemos, el problema eran los vividores y los que vendieron IU para pillar cachito en el chiringo que montaron los que no pillaban en IU. También es cierto que sigo soñando con Garzón picando piedra en un sitio muy muy frio, con un pijamita que no le cubra ni la calva, fuera de la verja somos unos pocos tirándole tomates podridos mientras vemos como va dejando la piedra bien pequeña, como pan rallado de granito y, aunque sé que Garzón & Cía. no eran el problema si no un síntoma más de la enfermedad de la que adolece la izquierda, esa imagen me agarra a la esperanza de un futuro mejor.
Ale, que os den.
