Jose Manuel Carrizosa.
El pasado jueves se movilizaron miles de trabajadores del sector del metal en Vigo, en su tercera jornada de paro, en rechazo a las propuestas de la patronal para la firma del convenio para este sector industrial.
A pesar de que los más de 4000 trabajadores que marcharon por la ciudad, según cifras de los sindicatos, tenían el permiso de la subdelegación del gobierno, la policía nacional impidió el paso de la manifestación, lo que provocó que los trabajadores en huelga tomasen rutas alternativas.
Una de ellas fue la marcha de los obreros hacia la Ifevi, donde se estaba realizando la feria Mindtech, dirigida por las principales figuras de la patronal del sector. Esta decisión se tomó para que se visibilizara el descontento de los trabajadores ante las propuestas, a su juicio desacertadas, de esta patronal.
A partir de ese momento la tensión fue en aumento. La acción de los manifestantes ante el cierre del paso por la policía fueron cortes esporádicos de la autovía AP-9, que fueron respondidos a su vez, con cargas policiales. Celso Carnero, secretario de Industria en Comisiones Obreras, sufrió un golpe por una pelota de goma en el cuello.
En torno a las 14:30 horas la manifestación se disolvió, sin detenciones policiales, pero sí identificaciones de algunos manifestantes.
Una nueva movilización está prevista para este miércoles 28 de junio, además de las jornadas de huelga de los días 6 y 7 de julio.
