Tumultuosa ha sido la respuesta popular a las convocatorias que se emplazaron en la mañana de hoy en las 8 capitales andaluzas, en llamado de la Marea Blanca al que respondieron hasta unos 30 colectivos diferentes, en defensa del servicio público sanitario. Bajo el lema «Andalucía se levanta por la sanidad pública» estos colectivos han recorrido las avenidas de las ocho ciudades con el seguimiento de un numeroso acompañamiento de personas preocupadas por el lamentable estado de este servicio imprescindible.
Las reivindicaciones de estas plataformas y colectivos se centran en frenar las privatizaciones y el trasvase de capital y medio públicos a manos de intereses particulares, además de detener el destrozo en la atención primaria y reducir las cada vez más largas listas de espera en los centros andaluces.
Lógicamente las protestas enfocan el empeoramiento de las condiciones laborales de los profesionales sanitarios, que son quienes finalmente sacan las castañas del fuego a los responsables administrativos y políticos, con su profesionalidad y esfuerzo. Esas condiciones llegan a un punto de sobrecarga y tensión que muchos profesionales acaban desistiendo y optando por las opciones que ofrecen los centros privados, que sí gozan del favor de los gestores.
En tiempos de una crisis que parece abocada a empeorar y enmarcada en un paisaje de guerra a la que el Gobierno no parece tener reparos, en su obediencia a los intereses económicos de las multinacionales, es esperanzador que aún haya muchas personas concienciadas en que sólo defendiéndola es posible mantener la Sanidad Pública.
