Aunque el pasado lunes lo negaban desde el Ministerio de Defensa ucraniano, las dimisiones se han ido sucediendo en tromba desde que el 21 de enero un periódico local informará de que el Ministerio de Defensa estaba comprando alimentos para los soldados del frente «inflando los precios hasta dos o tres veces por encima de su valor».
Aunque el Ministerio ha calificado lo sucedido de «problema técnico», el valor de dicho ronda los 350 millones de euros en distintos pedidos.
Hasta la fecha, se ha notificado la dimisión de hasta 10 altos cargos entre ministros, Viceministros, asesores de confianza. Las acusaciones van desde la mencionada adulteración de los precios hasta la recepción de sobornos.
Uno de los primeros en presentar su dimisión fue Kyrylo Tymoshenko, jefe adjunto de la Oficina del Presidente de Ucrania y mano derecha de Vladimir Zelenski.
También son llamativas las dimisiones del Viceministro de Desarrollo de Comunidades y Territorios de Ucrania, Ivan Lukeria; Vyacheslav Shapovalov, Viceministro de Defensa; Vyacheslav Negodu, Viceministro de Desarrollo; Vitaly Muzychenko, Viceministro de Política Social de Ucrania.
Entre las dimisiones, también se encuentran un buen número de líderes territoriales.
Destaca la dimisión, que Zelenski ha llamado eufemísticamente «reorganización», del Fiscal general adjunto Oleksiy Symonenko.
