El Secretario General del Comité Central del Partido Comunista de China
(PCCh), Xi Jinping, que cuenta con más de 95 millones de miembros, ha anunciado
hoy que China ha alcanzado uno de los objetivos del centenario: construir una
sociedad modestamente acomodada en todos los aspectos.
Así lo enuncio Xi, quien celebró que China ha resuelto el problema de la
pobreza absoluta y, afirmaba, ahora camina hacia la construcción de un gran
país socialista moderno en todos los aspectos.
Así mismo, el Presidente de la gran potencia mundial, en medio de un inédito
despliegue técnico, militar y organizativo, ha asegurado «quien intente
humillar a China «erminará con la cabeza estampada en la Gran
Muralla». Afirmó posteriormente «China no va a consentir sermones
moralistas».
Se comprende el uso metafórico del lenguaje, mediáticamente manipulado a
posteriori por los medios occidentales. El Presidente Xi Jinping, en ambas
intervenciones hacía referencia a la intención por parte de EEUU y el satélite
de éste, la UE, de socavar la soberanía china con injerencias similares a las
revueltas orquestadas en Hong Kong o a las sanciones propagandísticas
interpuestas por la UE.
El PCCh ha asombrado al mundo con su potencial en el año de su centenario, y
es que se trata de una de las mayores fuerzas políticas y culturales de todo el
planeta.