El alcalde de Valencia, Joan Ribó se ha despachado a gusto esta noche en ataques al comunismo, renegando de su propia historia personal como antiguo dirigente del PCE y cayendo en todos los tópicos acerca del comunismo defendidos tanto por la derecha como por la izquierda poscomunista que reniega de su pasado.
En el canal La 8 Mediterráneo a la pregunta directa de si era comunista, el político de Compromís ha respondido un tajante no. «Creo que en este momento los planteamientos comunistas están siendo superados por otros elementos que son mucho más acuciantes como todos los temas medioambientales.»
«Las cosas han cambiado mucho y no se pueden resolver los problemas con formas de tratarlos de hace un siglo», siguió el alcalde, que entraría además en la manida dicotomía libertad-comunismo que parece olvidar quiénes dieron su vida por la libertad en este país durante casi cuarenta años de dictadura: «Sobre todo hay un tema que a mí siempre me ha preocupado mucho y es el tema -y ahora sí voy a recurrir al topicazo- el tema de la libertad» porque «desde el planteamiento comunista clásico no ha sido tratado adecuadamente.»
El argumento inesperado final es que Ribó acaba poniendo de ejemplo a la Rusia actual de país carente de libertades, ignorando que la URSS se desintegró en 1991 y el país del este no es hoy un estado comunista.
