El Partido Socialista Unido de Venezuela convocó ayer a su militancia a cerrar filas de cara a las elecciones del próximo 6 de diciembre donde se renovará la Asamblea Nacional de Venezuela. Lo hizo en un momento de tensión entre esta organización y el Partido Comunista de Venezuela cuya línea política ha venido chocando en los últimos meses con el gobierno de Nicolás Maduro del que siguen siendo aliados, aunque cada vez más críticos.
Ante esta situación que amenaza con romper la unidad de acción del Polo Patriótico, el propio Diosdado Cabello, recalcó ayer a las fuerzas de Izquierda que lo conforman «que este es el momento de seguir avanzando en unidad absoluta, para el Parlamento vuelva de nuevo, de la mano del pueblo el Padre de la Patria, Simón Bolívar, y el comandante Hugo Chávez».
El PSUV así pide no dejarle espacio a la oposición mediante una victoria aplastante en las elecciones y asegurar así la mayor cantidad de escaños posibles en la Asamblea Nacional, algo a todas luces imposible en caso de que los bolivarianos acudiesen a los comicios en listas separadas, según advierten los socialistas.
