Según publicaron dos emisoras regionales públicas, WDR y NDR, las oficinas de sanidad alemanas carecen del personal necesario y únicamente 1 de cada 8 está en condiciones de realizar test a los «contactos cercanos» de las personas infectadas, estrategia de la que se vanagloria el Gobierno Federal germano para vencer al coronavirus.
Así, más del 65 % de las Oficinas de Sanidad incumplen los protocolos para localizar a quienes han estado en contacto con contagiados del COVID-19, lo que ha motivado una gran sensación de alarma en la población teutona.
Esto es especialmente preocupante ahora, que la potencia centroeuropea ha tomado la decisión de «aflojar sus fronteras», y que han aparecido nuevos focos de contagio en los últimos días en varios centros de trabajo, como el de un matadero del bundesland de Schleswig-Holstein, donde, entre sus 130 empleados se han detectado 82 nuevos positivos.