Los PTIS, Personal Técnico en Integración Social y los Intérpretes de la Lengua de Signos (ILSE), son los profesionales que en los colegios públicos andaluces se encargan de la atención a los niños con necesidades especiales. Este colectivo de trabajadores se encuentra subcontratado a través de la Agencia Pública Andaluza de Educación (APAE) con una empresa privada, Osventos.
Según fuentes sindicales, esta empresa privada incumple lo establecido en el convenio, con impago de nóminas, cambios en los contratos o reducciones de horarios con la consiguiente reducción de salario. Además, en algunos centros públicos andaluces se producen situaciones en las que un solo profesional debe hacerse cargo de decenas de alumos con estas necesidades.
De este modo, la empresa con intereses privados mantiene a esta plantilla de profesionales en condiciones laborales lamentables y con perspectivas de empeoramiento. Además, de manera indirecta, se produce el deterioro de la calidad de servicio que se ofrece al alumnado andaluz, siguiendo la inercia de las Administraciones en desgastar la Educación Pública en beneficio de los centros religiosos y/o privados.
Por ello, los representantes sindicales de este colectivo determinaron la realización de una primera jornada de huelga el pasado 27 de octubre, que hoy ha tenido su continuación en una segunda jornada en todas las provincias andaluzas. El seguimiento de estas jornadas de huelgas ha sido absoluto.
Los organizadores plantean convertir la huelga en indefinida a partir del 14 de noviembre en caso de que sus peticiones no sean atendidas, cosa que no ha sucedido por parte de los responsables políticos tras la anterior jornada de huelga del mes de octubre.
