Subidas salariales y carestía de la vida

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Los salarios de los trabajadores adscritos a un convenio colectivo volvieron a repuntar en julio, con una subida media pactada del 3,34 %, según la estadística publicada está semana por el Ministerio de Trabajo.

Aunque el dato hasta julio se sitúa por encima de la inflación general, que está en el 2,3 %— lo cierto es que estas subidas salariales acordadas para más de 8,9 millones de trabajadores siguen por debajo del 3,81 % que marca la media del índice de precios de consumo (IPC) durante los siete primeros meses del año.

Es decir, aunque la brecha entre inflación y salarios se ha estrechado en los últimos tiempos, la mayoría de trabajadores regulados por convenio aún pierden 0,47 puntos de poder adquisitivo en lo que va de año. De ahí que las familias no estén notando mejoría en su economía.

Es más, la subida salarial media también se queda casi tres puntos por debajo de la inflación subyacente (que excluye de su cálculo energía y alimentos frescos), que en julio aún se mantenía por encima del 6 %.

La estadística muestra también que la fecha de firma del convenio marca diferencias notables. Así, los casi 180.000 acuerdos suscritos este año (que afectan a 2,16 millones de trabajadores) recogen un alza salarial media del 4,2 %, mientras que en los firmados en años anteriores, cuyos efectos siguen teniendo consecuencias en el poder adquisitivo de la clase trabajadora, la subida para este ejercicio asciende, en promedio, al 3,07 %. Es decir, más de un punto de diferencia.

Los datos hasta julio muestran que de los cerca nueve millones de trabajadores amparados por convenio, dos millones contaban con mecanismos que permiten que el sueldo sea revisado al alza cada año en función del IPC para proteger su poder adquisitivo.

Por convenios, de los 2.885 registrados, 416 cuentan con esa cláusula de garantía salarial: 289 con efectos retroactivos y 127 solo a futuro, mientras muchos otros, sitúan las subidas salariales muy por debajo del IPC real, sin contemplar revisiones, condenando las familias trabajadoras a un empobrecimiento paulatino y continuo.

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