Josep Borrel, el Alto Representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, y vicepresidente de la Comisión Europea, ha recibido recientemente un zarpazo por parte del ejecutivo israelí, al afirmar el Ministro de Relaciones Exteriores sionista, Eli Cohen, que Borrell “no va a ser invitado para una visita oficial”.
Esta declaración surgió en una llamada telefónica entre Borrel y Cohen este pasado miércoles, en la cual el alto representante de la UE manifestó su intención de realizar una visita oficial al estado sionista de Israel. Según Cohen, Israel no está dispuesta a recibirle porque sus últimas declaraciones públicas no son merecedoras de ser invitado.
Las declaraciones públicas hacen referencia a la “escalada de violencia entre israelíes y palestinos”, y la “necesidad de que todas las partes reduzcan la tensión”. Unas palabras vacías de contenido, carentes como siempre de acciones, y en las que una vez más se equipara al verdugo y sus víctimas. Un verdugo que en lo que va de 2023 ha asesinado 89 palestinos, a razón de más de un palestino muerto por día.
Muy acertadamente, el eurodiputado de Unidas Podemos Manu Pineda, quien preside la Delegación para las Relaciones con Palestina, y a quien Israel le ha denegado la entrada a Cisjordania en dos ocasiones, publicaba en su cuenta de twitter al respecto el dicho popular de “cría cuervos y te sacarán los ojos”.
