Incidentes 8M

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Las jornadas de los últimos años en el ámbito de la lucha por los derechos de la mujer han estado llenas de grandes momentos y de momentos para olvidar, como la jornada del 8M de 2020 cuando cientos de activistas del movimiento feminista radical fueron acosadas o agredidas. Lejos de llevar esos instantes a algo del pasado el movimiento feminista ha seguido sufriendo la violencia en sus diferentes formas. 

Ayer, sobre las 8 de la mañana tres activistas fueron atropelladas a la altura de la calle Albert Bastardas cuando pretendían cerrar la carretera. Una de las mujeres sufrió una contusión de carácter leve. Los Mossos d’escuadra identificaron a la conductora del vehículo. 

Un grupo de Feministas increparon ayer a la Ministra de Igualdad, Irene Montero, en el acto institucional que se celebró en la mañana del 8M en el Teatro Pavón de Madrid. Desde Contra El Borrado de las Mujeres se quejaban en twitter de que la Ministra lleva tres años negándoles el debate y que ahora les habla desde su púlpito y con sus fans. La activista P. Bilbao le preguntó a si sabía decir lo que era una mujer, a lo que la ministra respondió que estaba ahí por el derecho de las mujeres con pene. A lo que la activista respondió que “si no sabes definir lo que es mujer, y no sabes por qué se nos oprime, que es por la condición del sexo con el que nacemos…” ahí ya no la dejaron continuar. 

Pero ahí no acabó la cosa, los guardias de seguridad indicaron la salida al pequeño grupo de activistas y al salir fueron acosadas por Pamela Palenciano, que con gesto chulesco increpó a las activistas.

https://twitter.com/anacum3/status/1633461004469411847?s=52&t=nZdWAwN1hyOgOqwTVCombw

A primera hora de la mañana apareció en Vallekas una pancarta sobre un puente en la que se podía leer: “TERF, VIGILA TU ESPALDA”. El desamparo del movimiento feminista es palmario. Ahí se quedó la pancarta durante todo el día sin que nadie hiciera nada ni se llevara las manos a la cabeza por el odio palpable contra las feministas radicales. 

En la manifestación de Barcelona un hombre vestido con cuernos de diablo arrojó el contenido de una botella contra las asistentes a la manifestación abolicionista. En un gesto amenazador rompió la botella e intimidó a las manifestantes con el objeto punzante resultante de la fractura de la botella. 

En Bilbao, la lectura del manifiesto del bloque abolicionista se llevó a cabo en los tinglados del ayuntamiento en previsión de actos violentos contra las manifestantes. Un grupo de activistas Trans se acercó y profirió gritos donde se decía que no hay feminismo sin los Trans.

El movimiento Bloque Abolicionista Galego también recibió amenazas e intento de boicot en las distintas marchas que se llevaron a cabo por toda Galicia como nos indica el activista Iñaki Quenerapú.

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