Belén Moreno, nacida en Madrid en 1966, actualmente vive en la provincia de Segovia. Madre de dos hijos, combina su actividad profesional en el sector privado, con la producción literaria, tanto en la publicación de artículos como de narrativa. Durante unos años, formó parte de los redactores de opinión política y feminismo de Alcantarilla Social. Actualmente es coeditora de la revista digital Mujeres en Lucha, dedicada a la crítica, divulgación y didáctica feminista a través de artículos de opinión.
Ha publicado tres novelas, El Espejo en 2015, Arturo en 2020 y La habitación de atrás en 2023.
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Trabajo como administrativa de Salud Laboral en una empresa de prevención.
Estudié Educación Social, aunque por motivos personales no pude terminar la carrera. Soy una persona muy metódica, un pelín controladora y ordenada. Me gusta todo lo relacionado con las artes, amante incondicional de la literatura, del cine y de cualquier expresión artística.
¿Cómo has llegado a la literatura?
Los libros han estado presentes en mi vida desde que tengo uso de razón. Mi madre, una ávida lectora, nos enseñó a mis ocho hermanos y a mí, a amar los libros a la vez que a comer. En mi juventud, comencé a escribir poesía, pero no es un género en el que me sienta cómoda, de hecho, aunque suene muy feo, tampoco leo poesía. Escribí las obras de teatro guiñol que representábamos en un grupo de teatro del que formé parte. Pero mi salto comenzó con artículos de opinión política en Alcantarilla Social. Fue una experiencia maravillosa, ya que además de los artículos, publiqué unos relatos cortos de temática feminista que espero poder recoger algún día en un único volumen. En 2015, publiqué El Espejo, mi primera novela y ya no he dejado de escribir.
Una obra relevante para ti es…
Cualquier libro es una fuente de aprendizaje y de experiencia literaria, pero si tuviera que elegir mis mayores influencias, no puedo olvidar Los gozos y las sombras o Saga fuga de JB de Gonzalo Torrente Ballester que de hecho es uno de mis escritores favoritos. Pero quizá la novela del siglo XVIII y XIX con escritoras como Jane Austen, las hermanas Brönte George Elliot, Henry James o Wilkie Collins, han ejercido una influencia muy importante en mi forma de escribir. No me gustaría olvidar a Almudena Grandes, con la que comparto ideología y feminismo o Vivian Gornik, la autora de Apegos Feroces, un libro que todas las mujeres deberíamos leer.
Sé que es muy dificiel pero ¿hay un libro favorito entre los favoritos?
Elegir un libro favorito es muy difícil ya que la lista sería interminable, por distintas y variadas razones. Pero aparte de los nombrados anteriormente, cualquiera de Thomas Pynchon (sobre todo Contraluz), La campana de cristal o Una habitación propia. Y hay un libro que para mi fue un antes y un después. se trata de Manual para mujeres de la limpieza de Lucía Berlín. Fue una lectura que me caló muy hondo y que releo de vez en cuando para no olvidar las emociones que me provoca.
El papel actual de la mujer en la literatura como creadora ¿se desmarca del segundo plano al que le ha condenado la historia en cuanto a visibilidad y creación de contenido?
Queda aún un sector poblacional importante que cree que las mujeres solo escribimos literatura para mujeres, porque los temas que trabajamos solo encuentran en otras mujeres a lectores interesados. Decía Anne Brönte que cuando un texto es bueno, es indiferente el sexo de la persona que lo ha escrito, lo importante es el texo en sí. Pero a las mujeres, en la historia de la literatura o se nos ha prohibido escribir obligando a utilizar pseudónimos, o se nos ha encasillado en un determinado tipo de temáticas, sobre todo, la literatura romántica. Dar por hecho que como escritoras y lectoras solo nos atraía ese género, es una forma de encorsetar la mente de las mujeres. Se pensaba que no solo no podían atraernos diferentes géneros, es que no estaban hechos para nuestro entendimiento. Las mujeres, tradicionalmente han sido infantilizadas y la literatura no iba a ser un sector distinto.
Sin embargo, ha sido una expresión de rebeldía constante. Las escritoras de una forma sutil, han logrado plasmar en sus textos las vidas, pesares, inquietudes, anhelos y frustraciones que se experimentaban en cada época. Creo que todo el sector literario, incluyendo a las y los lectores, tenemos una deuda pendiente con todas las que abrieron el camino antes que nosotras y visibilizar su trabajo no solo es una tarea de recompensa al trabajo hecho, si no un claro reconocimiento a una producción literaria de altísima calidad.
Feminismo y literatura. Un, dos, tres ¡dispara!
No creo en el género de literatura femenina. Si admitimos la existencia de este género (que empuja a las mujeres a consumir determinado tipo de libros porque todavía se piensa que no tenemos capacidad para apreciar temas en donde el amor no esté presente) damos por bueno que la sociedad patriarcal nos está diciendo qué leer y qué escribir. Es cierto que cada autora y cada lectora, tiene derecho a elegir la literatura con la que se sienta más cómoda, pero hay que erradicar la idea de que las mujeres preferimos la literatura romántica porque es como decía antes, un ejercicio de infantilización.
El amor romántico ha sido y sigue siendo un yugo en la vida de las mujeres. La creencia de que las mujeres nos realizamos a través de las relaciones amorosas, condiciona toda nuestra presencia en el espacio público y nos impone límites que impiden nuestro desarrollo personal. Por eso conmino a las lectoras, no ya que a que olviden el género si eso les hace felices personalmente pero sí que abran sus lecturas a nuevos géneros y nuevas literaturas. Llevo varios años leyendo solo literatura escrita por mujeres, no porque no quiera leer a hombres. Los he leído mucho, porque la falta de referentes femeninos en nuestra vida ha sido muy importante y en estos momentos, es mi forma de devolver lo que ellas me dieron antes a mi. Por dos razones principales, hay que darles visibilidad, no solo a las que escribieron. También a las que actualmente escriben y la segunda, porque las mujeres escriben muy bien,de cualquier tema.
¿Nos hablas de tus próximos proyectos?
Actualmente me encuentro en plena vorágine de la promoción de La habitación de atrás, pero no descuido mi papel en la revista Mujeres en Lucha donde publicamos artículos de opinión feminista y repasamos la situación actual de las mujeres en España con los problemas que está trayendo las leyes aprobadas por el gobierno actual.
Y por supuesto no dejar de escribir novelas, de contar historias que me permitan seguir aprendiendo y desarrollándome como escritora.
