La aviación israelí, en pleno alto al fuego entre Palestina e Israel, bombardeó la franja de Gaza durante la madrugada del pasado 16 de junio.
Ha sido el nuevo Gobierno del Estado de Israel el que ha ordenado romper el alto el fuego, después de semanas en las que Palestina seguía recomponiéndose de la ferocidad de los ataques perpetrados por el Gobierno encabezado por Netanyahu. En dichos ataques fueron brutalmente asesinados por las fuerzas de ocupación israelíes 240 palestinos, 67 de ellos menores.
La motivación principal de estos ataques, que no se prevé se produzcan a gran escala, es el veto por parte de Israel a la entrada de fondos que Qatar envía cada mes a Palestina y el bloqueo a suministros básicos, como el combustible para la única central eléctrica en la Franja de Gaza.
