La patrulla fronteriza y la máxima autoridad de EEUU en política migratoria, el Secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, han reconocido que el país está recibiendo una cantidad de niños migrantes mayor de la que esperaban y, añaden, “de la que las instalaciones son capaces de soportar”.
Además, el presidente Joe Biden ha pedido a los niños migrantes que “no vayan” a EEUU. Contrasta esta respuesta a la situación dramática que viven quienes tratan de cruzar la frontera con EEUU con las denuncias que emitía la candidatura de Biden y Kamala cuando estos todavía no estaban en el poder.
En la página oficial en español de la candidatura de Biden y Harris para las elecciones del pasado mes de enero, se pueden leer afirmaciones como “Trump ha lanzado un ataque implacable contra nuestros valores y nuestra historia como una nación de inmigrantes”, en referencia a la política migratoria del republicano, acto seguido se aseguraba “esto está mal y se detendrá cuando Joe Biden sea elegido Presidente”.
Además, la página asegura que una de las medidas de Biden cuando éste sea Presidente será “dar la bienvenida a los inmigrantes en nuestras comunidades”. También se aseguraba en campaña que el hacinamiento y la separación de niños migrantes de sus familias es “una vergüenza nacional”.
Las imágenes han tenido una enorme repercusión en redes sociales, aunque ni medios de comunicación de masas ni destacados dirigentes políticos que denunciaron la situación ante las mismas imágenes, siendo responsable entonces Donald Trump, han decidido pronunciarse al respecto para denunciar una situación apremiante que la alternancia política de EEUU ha demostrado no querer resolver.
