La sonda Chang’e-5 ha desplegado la bandera de la República Popular de China sobre la superficie de la Luna, una vez finalizado el proceso de recolección de muestras de suelo y rocas lunares objetivo de la misión.
La bandera china que ya ondea fuera de nuestro planeta mide 200 centímetros de ancho por 90 de alto, y ha sido fabricada con materiales especiales con el objeto de soportar temperaturas y radiaciones extremas sin perder su forma y color.
China se convierte de este modo en el segundo país en colocar su símbolo nacional en nuestro satélite, y en el tercero, tras los Estados Unidos y la extinta Unión Soviética, en sustraer material rocoso lunar para investigación.
