Las redes sociales ardían. Durante todo el día una de las tendencias principales en Twitter llamaba a una gran protesta ciudadana contra el gobierno de Pedro Sánchez. Y así, bajo el HT #Cacerolada21h cuentas cercanas a VOX de periodistas, políticos, gente anónima, y hasta cientos de cuentas bots que fueron descubiertas y señaladas por algunos usuarios de la red del pájaro azul, auparon a lo más alto la convocatoria que, de haber tenido éxito, podría haberse considerado la mayor victoria social de la extrema derecha en nuestro país.
Pero nada ha salido como esperabas algunos, pues parece que los bots no saben manejar cacerolas. Esta noche todo fue silencio. Y ni en los barrios con mayor presencia de votantes ultras tuvieron éxito alguno los convocantes. El propio periodista de Libertad Digital, Luis del Pino, que había estado publicitando la protesta todo el día, ha tenido que reconocer su fracaso absoluto llegando a afirmar que en su barrio se había quedado él «sólo, con una cacerola».
