Tal y como fue anunciado por las embajadas de la República Popular China en España e Italia, comienzan a llegar a Europa los primeros suministros médicos que el país donará a ambos países mediterráneos para ayudar en la lucha por el control de la pandemia de Coronavirus declarada por la Organización Mundial de la Salud.
Italia ha sido el primer beneficiario de estas ayudas que alcanzan las 26 toneladas de suministros médicos como mascarillas, trajes protectores, gafas o guantes, que serán bien recibidos en un país al borde del colapso sanitario y que no ha recibido ayuda alguna de ningún organismo supranacional a los que pertenece: ni la UE ni la OTAN.
La actitud china, que además ha ofrecido apoyo técnico a los países que lo necesiten, contrasta con la política que EEUU está llevando a cabo en esta crisis mundial, que se ha limitado a cerrar sus fronteras para protegerse de la pandemia demostrando con su falta de liderazgo en la crisis que un cambio en la hegemonía mundial se está consolidando.
[…] Mientras aplaudía a su alumna destacada en el Ministerio de Economía español, Alemania también continuaba con su particular sálvese quien pueda. El 4 de marzo de 2020, Alemania prohibió la exportación de mascarillas y de material sanitario. Es decir, ante la alerta sanitaria, Alemania, uno de los países con mayor producción de material farmacéutico y sanitario del mundo, podría haber optado por aumentar su gasto e incrementar la producción de este tipo de materiales para ayudar al resto de países europeos en situación de extrema necesidad. Sin embargo, optó por asegurarse de que todo material sanitario producido en Alemania se quedara en Alemania y fuera utilizado solamente por Alemania. Italia hubo de esperar sola, abandonada y sin posibilidad de aumentar su gasto hasta el 13 de marzo, día en el que comenzó a llegar la ayuda humanitaria enviada por la República Popular China. […]
[…] Mientras aplaudía a su alumna destacada en el Ministerio de Economía español, Alemania también continuaba con su particular sálvese quien pueda. El 4 de marzo de 2020, Alemania prohibió la exportación de mascarillas y de material sanitario. Es decir, ante la alerta sanitaria, Alemania, uno de los países con mayor producción de material farmacéutico y sanitario del mundo, podría haber optado por aumentar su gasto e incrementar la producción de este tipo de materiales para ayudar al resto de países europeos en situación de extrema necesidad. Sin embargo, optó por asegurarse de que todo material sanitario producido en Alemania se quedara en Alemania y fuera utilizado solamente por Alemania. Italia hubo de esperar sola, abandonada y sin posibilidad de aumentar su gasto hasta el 13 de marzo, día en el que comenzó a llegar la ayuda humanitaria enviada por la República Popular China. […]
[…] como países PIIG, quedaron desabastecidos. Solo recibieron ayuda de países de fuera de la UE como China y España. Los muertos en la periferia de la UE se contaban por millones. Los hospitales se vieron […]