Los trabajadores y trabajadoras del Servicio de Atención Domiciliaria, SAD, de Sevilla realizarán una concentración a partir del primer día de abril frente al Ayuntamiento de la ciudad, que será permanente hasta que sus reivindicaciones sean atendidas. Acometen estas acciones en iniciativa del sindicato CGT y ante la negativa del Consistorio en responder las preguntas y los requerimientos que los sindicatos de este colectivo llevan realizando desde hace tiempo, así como para paliar las graves carencias que vienen sufriendo estas trabajadoras y frenar el deterioro del servicio, que se mejoraría sustancialmente con la municipalización.
Hablamos de un servicio básico, el de atención domiciliaria, que va dirigido por ley a personas de todo tipo sin exclusiones y que precisen de esa atención por ser mayores, dependientes o con problemas puntuales como bajas o incapacidades. Este servicio recoge fondos públicos que van a los ayuntamientos y estos a su vez los derivan a empresas privadas.
Portavoces de CGT en contacto con este medio explicaron que se ven abocadas a reivindicar de esta forma sus derechos ante la pasividad de las entidades y el progresivo deterioro ya no sólo de sus condiciones laborales sino del servicio mismo.
Un colectivo feminizado que las multinacionales deterioran para obtener beneficio
Se trata de una atención de interés general cada vez más privatizada, que los ayuntamientos están entregando a empresas que pertenecen a multinacionales, como Eulen, Clece o Servisad. Estas empresas, como entidades de interés privado que son, acaban recortando gastos y aumentando su cuota de beneficio a través del empeoramiento de las condiciones laborales de las trabajadoras.
Es un colectivo ampliamente feminizado y esta circunstancia es aprovechada por las empresas, que tienden a la contratación de mujeres de otras nacionalidades que vienen a España buscando alguna mejora para sus hijos, y que por su especial fragilidad las empresas saben que aceptarán condiciones laborales más estrictas, lo que menoscaba la calidad laboral. Por ejemplo, las portavoces de CGT explicaron que estas empresas privadas no están pagando todas las horas que echan las trabajadoras, existe mucha parcialidad en los contratos y no se respeta el convenio.
Además las empresas juegan a su favor con los llamados reajustes, tiempos de los cuadrantes con los que redondean las horas concedidas a los usuarios. El resultado es que a las horas que la auxiliar no tiene que trabajar se les aplica ese reajuste y son unas horas que no se pagan, de manera que se queda el dinero la empresa que gestiona el servicio.
Todo este despropósito redunda no sólo en un empeoramiento del trabajo de estas mujeres, sino también en un empeoramiento del servicio, porque al reducir las horas y regatear el dinero se atiende menos tiempo a los usuarios y se atiende a menos usuarios, con lo cual las listas de espera se hacen interminables e incluso muchas personas mueren esperando que les llegue una ayuda de atención a domicilio.
La municipalización mejora la calidad del servicio
Que el servicio lo presten empresas privadas es una cuestión arbitraria decidida por las entidades políticas y gestoras, pues existen estudios de viabilidad que demuestran que los servicios públicos son mejores y superiores a los servicios privados.
Esto puede comprobarse en localidades en las que el servicio está municipalizado, como Jerez, Chiclana o Arahal. En esos municipios las empresas públicas hacen que las plantillas se aumenten, con lo cual se da servicio a más usuarios y en conclusión el servicio mejora. Y es superior incluso en la calidad de trabajo, pues según los sindicatos los trabajadores de estas plantillas públicas perciben una diferencia superior en torno a los 200€ de sueldo.
Una acampada permanente
Para reivindicar todas estas sensatas peticiones, las compañeras iniciarán la acampada frente al Ayuntamiento de Sevilla, el tiempo que sea necesario y en continuidad de 24 horas, para exigir la municipalización del servicio y que se corrijan todas esas deficiencias que se están produciendo y que empeoran la calidad de una tarea tan necesaria.
L@s trabajadores de este sector , necesitamos que la junta o los ayuntamientos se hagan cargo de el servicio y de nosotr@s , por nuestra dignidad y por el respeto a los usuarios..