Todavía con el desconcierto de la opinión pública sobre lo ocurrido el fin de semana, Prigozhin, líder del grupo mercenario Wagner ha querido dar explicaciones sobre los motivos que le llevaron a emprender una marcha hacia Moscú que se dio la vuelta a 100km de la capital rusa por mediación de Lukashenko.
En su canal de Telegram, el jefe del grupo Wagner, quien colabora con Rusia en diferentes conflictos, ha emitido un vídeo en el que ha asegurado que «la marcha por la justicia» tan sólo pretendía «denunciar la destrucción de Wagner» y que, en ningún caso, tenía como objetivo derrocar a las autoridades rusas. La versión actual contrasta con las palabras pronunciadas el pasado fin de semana donde aseguraba «Rusia pronto tendrá un nuevo Presidente».
La realidad es que a día de hoy todavía desconocemos los motivos reales que llevaron a Wagner a emprender la sonada marcha, también si surgió de manera espontánea, fue una escenificación o las autoridades rusas y Wagner formaron parte de la puesta en escena sin ser conscientes de ello.
Serguei Lavrov, Ministro de Exteriores ruso, ha anunciado hoy mismo que Wagner seguirá operando en Mali y República Centroafricana, lo que invita a pensar que la ruptura entre el grupo mercenario y el Gobierno ruso no es total.
