La conocida fascista Isabel Peralta llegó al aeropuerto de Frankfurt con una bandera con la esvástica, propaganda fascista, el Mein Kampf y un llavero con simbología nazi.
Presumiblemente, la joven iba a Alemania para participar en eventos de la extrema derecha, aunque aseguró que portaba el material incautado por coleccionismo y porque estudia historia.
Peralta se hizo célebre por sus discursos abiertamente antisemitas en los que se dirigía a un grupo de falangistas, enfundada en una camisa azul Mahón.
El mismo miércoles por la noche, Peralta fue devuelta en un vuelo a España, donde hace gala con impunidad de sus ideas fascistas.