Stefan Löfven, primer ministro sueco, dimitió el pasado lunes para evitar un adelanto electoral.
La dimisión del primer ministro, representante del partido de la socialdemocracia sueca, se produce después de que su alianza con la líder del centro liberal sueco para liberalizar el mercado del alquiler fracasase. A esta reforma se opusieron tanto conservadores como el Partido La Izquierda, siendo este último un apoyo coyuntural en el pacto de investidura para otorgar la presidencia a los socialdemócratas.
El Partido La Izquierda, el cual tiene raíces comunistas, se opuso tajantemente desde un principio a la reforma del mercado del alquiler, que pretendía su liberalización en edificios de nueva construcción. Señalaron, además, que el Partido Socialdemócrata había abandonado al pueblo sueco tratando de demoler uno de los pilares fundamentales del Estado de Bienestar del país.
El primer ministro ha anunciado su dimisión tras perder la moción de censura presentada por los conservadores y que se saldó con 181 votos en su contra, de un total de 349 diputados, evitando de esta manera elecciones anticipadas.
