¿Terrorista quién? ¿Democracia dónde?
Decía hace poco Pedro Sánchez ( nuestro presidente “social-comunista”) que “España es una democracia plena”, y lo ha dicho poco después de que la normalidad democrática Española haya sido algo que se ha puesto en duda en estas últimas semanas después del encarcelamiento del rapero Pablo Hasél. Parece ser que hay quiénes se atreven a cuestionar lo democrática y libre que es España quemando contenedores sin motivo alguno, pero podemos hacer un repaso en lo que respecta a la jefatura del Estado, (por poner un ejemplo de institución democrática) para entender en qué consiste la normalidad democrática española a día de hoy.
Pues bien, España es tan democrática que goza de una monarquía cuya legitimidad nace gracias a la designación que hace Franco en Juan Carlos I como heredero en la jefatura del Estado. España es tan democrática y los Borbones son tan patriotas que tienen un pie en Suiza y otro en Arabia Saudita. España es tan democrática y la familia Real tan ejemplar que el escándalo de corrupción de Iñaki Urdangarin basado en malversación, fraude, prevaricación, falsedad y blanqueo de capitales es solo un “caso aislado”. España es tan democrática y la corona es tan ejemplar que la cantidad de millones de euros no declarados que poco a poco se van descubriendo que tenía el emérito en cuentas bancarias en el extranjero son minucias sin importancia. España es tan democrática y la monarquía es de la misma manera tan democrática que por eso Juan Carlos I, después de que se destaparan parte de sus tropelías y robos, hace lo que todo jefe de Estado democrático haría y se encuentra fugado de la justicia en Arabia Saudita.
Podríamos poner más ejemplos de lo democrática que es España en función de lo democrática y ejemplar que es también la jefatura de Estado que disfrutamos, pero sobre todo España es un país tan democrático que puedes ir a prisión por decir cosas como:
“El mafioso del Borbón de fiesta con la monarquía saudí, entre quienes financian al ISIS queda todo”
o como:
“El mafioso del rey dando lecciones desde el palacio, millonario a costa de la miseria ajena. Marca España.”
o bien:
“Lo más asqueroso de la monarquía es que millonarios por la miseria ajena, finjan preocuparse por el pueblo.”
y mi favorita:
“La mierda de Pablo Iglesias de risitas en la Zarzuela sin reprocharle al Borbón las atrocidades de las que son responsables”.
Estos mensajes y otros tantos calificados como enaltecimiento del terrorismo, son el motivo por el cual Pablo Hasél cumple prisión.
Porque España es un país tan democrático que como se te ocurra decirlo vas a prisión.
Ahora bien, si España, sus instituciones, sus Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, y la Monarquía son tan democráticos, y todas estas cosas que se denuncian ocurren de por sí, ¿por qué meter en prisión a alguien por cantarlo y plasmar en papel que Juan Carlos I ha robado y la familia real vive del cuento?
La corrupción, los sobresueldos, la herencia franquista, lo anacrónico y déspota que supone tener una monarquía a día de hoy… forman el ADN de la “democracia plena” española. Para la mayoría de partidos que defienden el Régimen del 78, esto que canta y dice Pablo Hasél no debería sorprenderles puesto que Pablo Hasél simplemente está describiendo objetivamente la realidad de la monarquía española.
Bueno vale se acabó la ironía, igual España no es tan democrática como te habían contado, pero es que para colmo si te manifiestas contra el encarcelamiento de alguien que canta las vergüenzas del régimen la respuesta por parte del Estado no te iba a sorprender: represión, represión y más represión. Porque el paro, la precariedad, la corrupción, la falta de oportunidades y ahora el encarcelamiento de alguien que canta lo que igual se te ha pasado a ti por la cabeza, son el detonante de la rabia que se ha vivido en numerosas ciudades españolas, rabia que ha encontrado como respuesta abuso policial, violencia, detenciones y encarcelamiento.
Ayer mismo lo vivieron de nuevo los compañeros en Madrid cuando el despliegue policial les impidió manifestarse y encima les identifican, cachean y amedrentan para asustar a cualquiera que pretenda gritar semejantes injusticias. Lo normal en una democracia plena que garantiza el derecho de manifestación.
Por tanto no podemos olvidar que democracia plena a día de hoy, en boca de quienes defienden el Régimen del 78 significa paro y desempleo acuciante, significa que si tienes trabajo es precario y a saber si puedes contar con él el mes que viene, significa el auge de la extrema derecha que se jacta de su machismo, xenofobia y misógina, significa la corrupción impune, significa que se haga público que en un grupo de WhatsApp militares puedan hablar de fusilar a millones de rojos y esa libertad de expresión no encuentre límites, significa que no puedas ver a tu familia pero sí que vengan guiris mientras trabajas sirviéndoles la mesa y tu abuelo sigue en la UCI, significa que los poderosos de siempre sigan manteniendo sus privilegios mientras tú haces cuentas para llegar a final de mes… en definitiva la democracia plena y la normalidad democrática Española a día de hoy significa la libertad y la impunidad para unos pocos de privilegiados, y mordaza y prisión para quienes se atrevan a denunciarlo.
Pero menos mal que tenemos al gobierno más progresista de la historia para que en lo esencial nada cambie y el régimen del 78 siga igual de democrático por los siglos de los siglos.
