Mientras los proyectos de vacunas en Europa y EEUU presentan nuevos reveses que retrasarán su producción, China ha anunciado a través de su funcionario Zheng Zhongwei, de la Comisión Nacional de Salud, en una conferencia de prensa en Beijing que el país está preparado para la producción total de más de 610 millones de dosis anuales.
El responsable anunció que las personas con dolencias previas y con alto riesgo de exposición al virus tendrán prioridad a la hora de acceder a las vacunas, que serán consideradas un bien público, con lo que su precio se establecerá en función del costo en lugar de la oferta y la demanda.
Así, el estado chino vuelve a demostrar una vez más su capacidad y eficiencia a la hora de luchar contra el virus, mientras que Europa y América se hunden en una segunda ola de esta pandemia que se ha cobrado la vida de más de un millón de personas desde marzo.
