Todas las encuestas le dan mayoría absoluta, o casi, a la derecha. Todo parece indicar que podrán gobernar si les dejan. ¿Por qué digo “si les dejan”? Porque no se ve con buenos ojos desde Europa. La llegada de la Presidenta de la Comisión Europea, Úrsula Von del Leyen a España el pasado día 3 y los comentarios que hizo al respecto nos lo ponen de manifiesto. Sus palabras exactas fueron: “El extremismo está volviendo. Tenemos que dar confianza”. Además, la coincidencia de la Presidencia Española del Consejo de la Unión Europea nos pone el foco directamente. El momento político en medio de las consecuencias de una pandemia, de una guerra en Europa y de los futuros recortes que tendremos que implementar va a dejar a España con una posibilidad real de un mandato convulso. Lo que no es, precisamente, lo que desea ahora Europa.
Voy a tratar de explicar lo que creo que va a ocurrir. El PP va a ganar las elecciones generales pero por menos de lo que apuntan las encuestas. El PSOE va a recoger el voto del miedo y el voto útil a pesar de que va a crecer mucho la abstención. En esa tesitura el PP va a tener que decidir si quiere gobernar con Vox. Las cuentas van a dar o, al menos, van a estar muy cerca de tal forma que podrían gobernar en minoría sin grandes problemas pero con la condición de meter en el gobierno a Vox con sus respectivos ministerios.
Alberto Núñez Feijóo querrá gobernar solo porque los poderes europeos se lo van a exigir y Vox no va a consentir dar sus votos gratis. Así que nos vemos en un impás. Tal y como sucediera en 2019, el PP va a intentar una investidura a toda costa apelando a la cordura y al momento histórico que vivimos. No lo va a conseguir. Se van a repetir las elecciones dentro de seis meses.
Mientras, el Gobierno interino sufrirá las consecuencias de ser considerado por los medios como un Gobierno okupa y la situación de crispación se va a acrecentar durante todo el otoño y el invierno. Lo que pienso que puede ocurrir es que se aproveche la situación para regresar directamente al bipartidismo. Se le echará la culpa tanto a Sumar como a Vox y para fin de año las nuevas elecciones darán como resultado 320 escaños para el bipartidismo haciendo desaparecer prácticamente a los dos partidos muleta reiniciándose así el sistema.
Llamamientos al voto útil y a la legitimidad del bloque constitucionalista del 78. Discursos contra todo aquello que piense de una manera diferente o que pueda representar la intención de un cambio profundo. Recortes en los derechos de reunión y manifestación. Desmantelamiento de las RRSS tal y como las conocemos. Refuerzo de las Fuerzas de Orden Público. Nueva operación araña. Detenciones arbitrarias. Entonces sí, ganará el PP por mayoría absoluta. Habrán triunfado las élites de nuevo.
