La guerra electrónica (EW) es el conjunto de acciones militares que utilizan la energía electromagnética ‒desde las ondas de radio hasta los rayos gama‒ para atacar a un enemigo y hacerse con el control de sus radiaciones. En su mayoría son transmisiones de voz, radio, radar y microondas, sobre las que fluye la información, la inteligencia, los datos, las imágenes y se cursan las órdenes y los informes. Rusia ha dispuesto sus unidades de combate estén respaldadas por Batallones y Brigadas especializadas en EW. Con una superioridad total sobre las fuerzas ucranianas, entre sus misiones están las de interferir, neutralizar y bloquear las transmisiones HF, VHF y UHF.
La infraestructura energética en Ucrania se ve afectada constantemente por bombardeos selectivos rusos que afectan las comunicaciones y el transporte entre las tropas ucranianas. Para subsanarlo EEUU proporcionó a los ucranianos el acceso a los sistemas satelitales Starlink para acceder a Internet y resolver los problemas de cooperación entre las formaciones ucranianas.
Las terminales Starlink permiten a las Fuerzas Armadas ucranianas controlar drones, apuntar armas y misiles a objetivos, recibir inteligencia y comunicarse en áreas donde no hay redes seguras debido a los fallos de la red electrónica.
Starlink es el proyecto SpaceX de Elon Musk para crear un sistema de satélites (una constelación de satélites de internet) que brindan acceso global a Internet de alta velocidad. Se encuentran en una órbita con una altitud de 550 y facilitan servicios de internet de banda ancha con baja latencia con cobertura mundial a bajo costo.
SpaceX comenzó a lanzar satélites Starlink en 2019. En septiembre de 2022, Starlink había colocado más de 3,000 satélites y entregó miles de antenas parabólicas de Internet por satélite Starlink a Ucrania. Este canal de comunicaciones espaciales es el principal para garantizar una interacción sostenible, realizar bombardeos, reconocimiento y navegación.
Sistema Peresvet
Los satélites «Starlink» de Elon Musk fueron alcanzados por los rusos con artillería láser de combate del sistema Peresvet, así informó el Financial Times en su edición británica que la conexión con la red Starlink, «cayó» en varias regiones a la vez: Kharkiv, Zaporozhye, Kherson, así como en varios territorios de la RPD y LPR.
Estos satélites privados Starlink de detección remota de la Tierra (ERS) utilizados para obtener datos de inteligencia están ubicados en órbitas bajas, lo que justifica el uso de láseres contra ellos al realizar operaciones militares.
Space Review informó que el sistema Peresvet no se dedica solo a «cegar» el satélite de reconocimiento del enemigo, sino a «iluminar» su equipo, interrumpiendo su operación. Según los estadounidenses, hay una pérdida temporal de capacidades de los dispositivos ópticos y electro-ópticos del satélite. Space Review aclara que el complejo Peresvet se refiere a armas basadas en nuevos principios físicos y tiene la designación oficial 14Ts034. Sin embargo, los expertos aún no han podido determinar el tipo específico de láser utilizado en este complejo. Presumiblemente, esto podría ser un láser de bombeo nuclear o un láser de fotodisociación de oxígeno-yodo con bombeo explosivo de yodo.
La radiación del láser «Peresvet» es capaz de sobrecargar las matrices de los tubos intensificadores de imagen de los satélites, y «se quedan ciegos». No es posible reparar satélites en órbita.
En la literatura sobre sistemas láser ASAT, se hace una distinción entre «deslumbrante» y «cegador». El deslumbramiento hace que los sensores pierdan temporalmente su capacidad de imagen al inundarlos con una luz que es más brillante que la que están tratando de captar. El cegamiento inflige daño permanente a tales sistemas.
En marzo 2018 Putin anunció los últimos tipos de armas estratégicas rusas, entre las que se nombró el láser de combate Peresvet, en un mensaje a la Asamblea Federal. Las instalaciones del complejo Peresvet, como anunció más tarde el ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, a partir del 1 de diciembre de 2018, asumieron el servicio de combate experimental.
Kalina: un láser terrestre ruso para deslumbrar a los satélites de imágenes.
Las unidades rusas de EW
Buscan las señales que emiten los radares de contrabatería y los equipos electrónicos de la defensa ucronazi para impedir su buen funcionamiento. Intentan degradar, cegar o falsificar las emisiones sobre territorio ucraniano de los sistemas de navegación y posicionamiento GPS (norteamericano), GLONASS (ruso), Galileo (europeo) y Beidou (chino).
Los sistemas rusos RB-109A “Bylina” y Tirada-2 se utilizan para interferir o bloquear las señales de los radares y satélites que guían las trayectorias de los misiles de medio alcance desplegados en el teatro de operaciones.
Los rusos han desplegado la estación de interferencia R-934B “Sinitsa”, dedicada a interrumpir e incluso dañar las comunicaciones y sistemas de guiado de los satélites en órbita terrestre baja. Y el sistema de supresión electrónica más avanzado de Rusia, el RB-301B “Borisoglebsk-2”, que bloquea los canales de radio HF y UHF terrestres y aéreos de los militares de Ucrania. Y también el RB-636 “Svet-KU”, cuyo papel es localizar e interceptar señales de radio.
Para reconocimiento y ataque electrónico están el 1RL257 “Krasukha-C4” y la estación de interferencia automática R-330Zh “Zhitel”. Ambos están enfocados a obstaculizar y taponar a grandes distancias las señales de los radares de los aviones de alerta y control aerotransportados AWACS E-3 Sentry y AEW E-2 Hawkeye de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, que intentan localizar los cazas rusos en vuelo.
Los inspectores de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), confirmaron la presencia de al menos una docena de sistemas rusos de EW, en su mayoría montados sobre vehículos oruga y camiones todo terreno. Entre ellos está el sistema de guerra electrónica RB-341В “Leer-3” apoyado por drones Orlan-10, cuya labor es interceptar las señales de navegación vía satélite, las comunicaciones 3G, 4G y los mensajes de texto.
Respaldo de muchas empresas norteamericanas. Microsoft brinda asesoramiento al gobierno de Kiev para neutralizar los ciberataques rusos.
Starlink, la constelación de satélites situados a 600 kilómetros de altura, mantiene sobre Ucrania conexiones de Internet con una velocidad de descarga de más de 90 Mbps, son los que están siendo «cegados» por el sistema Peresvet.
Entre el nuevo equipamiento de Kiev está el sistema anti dron Bukovel-AD de unos 50 kilómetros de alcance.
Otro sistema de interferencia de comunicaciones es el R-330UM Mandat-B1E. Está diseñado para recopilar datos sobre las fuentes de emisión y luego irradiar una señal de barrera que interfiere las transmisiones dentro de una pequeña área geográfica. Un tercero es el sistema Anklav, concebido para bloquear los canales de control y telemetría utilizados por las municiones guiadas de precisión y los drones rusos
