Tras un calvario de casi 10 meses en prisión, un comité penitenciario ha concedido a Juana Ruiz Sánchez la libertad condicional. En el pasado mes de diciembre, la petición de libertad condicional le fue denegada pero la defensa de Ruiz Sánchez recurrió dicha denegación, y ha sido finalmente aceptada. No obstante, aún falta que sea ratificada esta decisión por la Fiscalía.
Juana Ruiz Sánchez es una ciudadana española que lleva residiendo en Palestina desde 1985. En el año 1993 comenzó a trabajar en la ONG Health Work Committees (HWC) como coordinadora de proyectos. Esta ONG, junto con otras, ha sido declarada por Israel como una organización terrorista, en un intento de hacer la guerra contra la sociedad civil palestina.
El 13 de abril del pasado año Juana fue detenida y 3 semanas más tarde acusada de 5 cargos. El 17 de noviembre fue finalmente condenada por un tribunal militar israelí a 13 meses de cárcel, tras aceptar la acusada un acuerdo de culpabilidad de dos de los cinco cargos para rebajar la pena.
El caso de Ruiz Sánchez ha suscitado una fuerte campaña en su apoyo a nivel estatal, ya que se trata de una cooperante muy conocida por las ONG’s españolas que han hecho público su respaldo a la cooperante y al riguroso trabajo desempaño por HWC.
No es habitual que una persona de nacionalidad europea sea acusada y condenada en estas circunstancias en Israel, por un tribunal militar, en un proceso similar al que se lleva a cabo para encarcelar a cualquier persona palestina. Por este motivo el caso de Ruiz Sánchez ha suscitado la atención internacional. Aunque desde luego el papel de la diplomacia española ha sido de una tibieza vergonzosa.
