Sindicatos de trabajadoras y trabajadores músicos representados por la Sección de Músicas CNT Madrid (CNT Madrid) la Coordinadora Sindical de Trabajadoras/es Músicos (CST-Músicos), la Caja de Músicos de Gijón, el Sindicat de la Música Valenciana (SIMUV) y el Sindicat de Musics Activistes de Catalunya (SMAC!), rechazan la celebración del próximo lunes 21 de junio del «Día europeo de la música».
Denuncian de este modo que «administraciones públicas y partidos políticos» organizan ese día «actuaciones y conciertos en los que no se respeta la legislación vigente, ni los mínimos de contratación».
«Todos los 21 de junio las y los músicos celebramos el día de la música. O más bien nos unimos a celebraciones que proponen aquellas y aquellos que ganan dinero con nuestro trabajo y en las que pintamos lo mismo que en el mundo de la música» indican en su comunicado.
Desde los sindicatos explican los motivos por los que rechazan las celebraciones de este día, «Celebraríamos de buen grado esta fiesta, y cualquier otra, si se cumpliesen los mínimos legales en nuestra profesión. Celebraríamos si se nos reconociese la laboralidad de nuestro trabajo cuando actuamos en espectáculos públicos, como figura en el Estatuto de las trabajadoras y los trabajadores. Celebraríamos si se respetaran los mínimos fijados en el Convenio Colectivo de Salas de Fiesta, baile y Discotecas, que es el que regula nuestro sector».
«También lo haríamos si se prestara un poco de atención a ese convenio por parte de la mesa que lo negocia. Celebraríamos si las salas programaran, como dicen que hacen cuando piden ayudas y subvenciones, no que nos alquilen sus locales, lo que al final provoca que tengamos que pagar por hacer nuestro trabajo», han matizado.
De igual forma, aclaran «Celebraríamos que se nos remunerara justamente por nuestra difusión en plataformas digitales, y que tuviésemos entidades de gestión que velaran por nuestros intereses. Y celebraríamos también que en ese Estatuto de Artista, que se espera con fervor en el sector cultural, se hubiese tenido en cuenta la realidad del trabajo de la música en sus propuestas, en lugar de la de la de la industria. Una industria que solo vela por sus intereses a costa de aquellas y aquellos que hacemos el trabajo más duro. Porque sí, la música es trabajo».
Y para finalizar, los representantes sentencian «¿Algo que celebrar el Día de la Música? Nada que celebrar».