El pasado viernes 17 de abril, el Ministerio de Sanidad denunció anomalías en su cuenta oficial a Facebook. Hoy dicha red social ha eliminado una red de cuentas falsas que infló con interaccciones sus publicaciones.
Facebook dice bloquear diariamente miles de cuentas fake como estas pero, al parecer, en esta ocasión se esquivaron sus controles automatizados, creando los perfiles a tal velocidad que consiguieron esquivar el algoritmo.
Al parecer, comprar una acción de ese tipo sale por unos 30 euros y es rápido y fácil por lo que cualquiera podría haber contratado esos perfiles tan burdos. Además, es prácticamente imposible demostrar su autoría.
Es, precisamente, lo zafio del ataque lo que, a ojos de muchos expertos en marketing digital, podría indicar que el objetivo del mismo no es otro que desprestigiar al Gobierno, para continuar con la campaña de intoxicación y acoso que la ultraderecha lleva a cabo desde las redes sociales desde que comenzó esta crisis, con motivo de la pandemia del coronavirus. En definitiva, sería demasiado estúpido que el Ministerio hubiese comprado la interacción de unos perfiles tan evidentemente falsos.