Danicely Vidabut Soularit, cubana y miembro de la Junta directiva de la Asociación de Cubanos Residentes en Andalucía «Tocororo».
Este contenido forma parte del especial #EnDefensaDeLaRevolución que desde El Común hemos lanzado para arrojar luz en las tinieblas informativas sobre los sucesos que están ocurriendo en Cuba. Defender la Revolución y su legado, frente a aquellos que hacen uso de la mentira para intentar tumbar un sistema es nuestro granito de arena en esta desigual batalla contra los mass media.
Lo negarán una y mil veces, pero Cuba sufre desde hace más de 60 años un cruel Bloqueo impuesto unilateralmente por EEUU con la única intención de asfixiar al pueblo cubano, hacer descarrilar el modelo social al que aspira, negarle su soberanía, someterla y apoderarse de ella.
Lo negarán una y mil veces, pero la Asamblea General de las Naciones Unidas, con los apoyos prácticamente unánimes de la Comunidad Internacional viene desde 1992, año tras año, condenando el Bloqueo y exigiendo su levantamiento -éste mismo año 184 países han vuelto ha hacerlo- y que, no obstante a ello, el país que se cree con el derecho de imponer sus criterios continúe violando los derechos humanos de nuestro pueblo.
Lo negarán una y mil veces, pero a pesar de que el 70% de la población cubana hemos nacido bajo los efectos de tal ignominia y venimos soportando el sufrimiento que conlleva, son millones quienes continuamos apoyando contra viento y marea la independencia de nuestra Patria y el derecho a decidir sobre su futuro sin tutelas y sin condicionamientos.
Lo negaran una y mil veces, pero saben bien que nadie, ningún país del mundo habría podido resistir un asedio similar, y a pesar de ello garantizar con muchas dificultades un sistema público de educación y sanitario que ya quisieran para sí otros muchos países.
Lo negarán una y mil veces, pero si hablamos de la pandemia, y a pesar de que en la actualidad se encuentra en su peor momento, Cuba presenta unos datos de contagios y fallecidos verdaderamente sorprendentes, entre los que cabe incluir a aquellos del primer mundo que disponen de innumerables medios y de economías desarrolladas.
Lo negarán una y mil veces, pero mientras Cuba tiene un indice de fallecidos de acuerdo a su población de 14 por cada cien mil habitantes; Brasil con 253, Colombia con 226, Chile con 179, Perú con 567, España con 172 o los campeones de la libertad y los derechos humanos EEUU con 184, por poner sólo algunos ejemplos que alumbran la verdad.
Podríamos seguir, pero lo negarán una y mil veces. Mientras tanto cabe señalar que todo ello ha ocasionado en Cuba serios problemas -no solo no hay que negarlo, es absolutamente necesario que se conozca y se denuncie-; que la situación económica se encuentra en un momento extraordinariamente difícil; y que la pandemia lleva días haciendo estragos, algo que sin duda aprovechan los cínicos para arremeter contra un país lleno de humanismo y dignidad. Para eso estuvo siempre diseñado el Bloqueo, ¿si no para qué? ¿Es acaso un entretenimiento? De eso se trataba y por eso se mantiene.
Y son precisamente esos cínicos, aquellos que ejecutan el Bloqueo, los que lo apoyan, y quienes lo silencian, los que en un ejercicio de doble moral proponen ahora el famoso “corredor humanitario”; subterfugio para intervenir en Cuba, en primera instancia para desposeer del poder a la dirección del país, sin descartar llegado el caso una ocupación de carácter militar. Para ello necesitan revueltas y conflicto social, y en ello están. Los ejemplos de EEUU en la historia están ahí y en éste caso no sería distinto.
EEUU y sus cínicos acompañantes y voceros no tienen ningún interés por nuestro pueblo, y si así fuera, que no lo es, que levanten el Bloqueo; lo demás sólo son juegos de palabras, artificios que ocultan el verdadero objetivo. Establezcan un corredor humanitario en el Brasil de Bolsonaro que deja morir por centenares de miles a su población, en la Colombia de Duque que masacra a su población en las protestas y por centenares a los líderes sociales; exijan libertades en Marruecos o Arabia Saudí; denuncien la masacre en Palestina; hagan algo para que el pueblo saharaui vea reconocidos sus derechos sobre su tierra. Muchos otros ejemplos podríamos señalar, son bien conocidos, pero los cínicos con sus potentes altavoces lo negarán una y mil veces.
Cínicos, tomen nota: Cuba no necesita corredor humanitario alguno, sólo necesita que la dejen en paz, que levanten el Bloqueo y la dejen recibir el apoyo noble y solidario de aquellos que nunca olvidarán y permanentemente agradecerán la solidaridad que Cuba siempre les prestó.
Cínicos, tomen también nota de esto: Vuestro intento, doloroso para nuestro pueblo, se saldará con un nuevo fracaso, y Cuba, como en otras ocasiones, saldrá adelante con el apoyo de una mayoría que jamás se arrodillará.
